Simplificando mi vida
Siempre que va a concluir el año, suceden cambios importantes en nosotros, tanto internos como externos, y el 2010 para mi no ha sido la excepción. Por razones que no ameritan ser comentadas aquí, en los próximos días estaré dejando el lugar donde viví durante los últimos cinco años. Un lugar que a nivel de espacio físico me quedaba realmente grande, y que encerraba un cúmulo de recuerdos que estoy lista para dejar atrás. Es increíble como algo tan cotidiano como una mudanza puede traer a la mente tantas reflexiones y sentimientos encontrados: representa el final de algo que fue construido con mucha ilusión, pero que por causas del destino no pudo prosperar, pero a la vez, significa la oportunidad de comenzar de nuevo, desde cero y con nuevas esperanzas de las cosas buenas que habrán de venir. Por otro lado, mientras me encuentro empacando, rodeada de una cantidad considerable de cajas, me pregunto: ¿Por qué acumulamos tantas cosas que no usamos? ¿Qué queremos lograr con esto? ¿Hay alg