Soñar es Vivir
Aunque mucha gente no lo crea, los sueños deben formar parte esencial de nuestro diario vivir. Son ellos los que nos infunden energía para luchar por todo aquello que queremos lograr. Pienso que dejar de soñar es empezar a morir lentamente. Si te pregunto que cantidad de tiempo en el día dedicas a soñar despierto, probablemente pensarás que me volví loca, pero te garantizo que si hacemos una pausa dentro de nuestro arrollante ritmo de vida, para dedicarnos a soñar un poco, la calidad de nuestra salud emocional fuera otra, mucho mejor. ¿Por qué lo veo así? Porque generalmente soñamos con cosas que queremos lograr, con estar en una situación mejor a la que estamos en el momento, o con personas que amamos, y todo eso nos llena de pensamientos positivos, que eventualmente van a redundar en acciones también positivas que nos llevarán a materializar todo lo que está plasmado en nuestra mente. La simple perspectiva de que algo que anhelamos pueda hacerse realidad nos lleva a hacer el esfuerzo