Hacia donde nos empuja la cultura light


Es innegable que los nuevos tiempos también han generado nuevas corrientes culturales. La mayoría de estas han sido importadas y adoptadas con mucha facilidad. Se han introducido modificaciones importantes hasta en la forma de alimentarnos, en algunos casos para bien y en otros para mal.


Hoy tenemos más personas que hace 25 años atrás que sin haber alcanzado los 40 años de edad ya han tenido que visitar el quirófano del cirujano cardiovascular o son diabéticos en potencia.


Es una cultura que empuja al individuo a través de una propaganda comercial a consumir y para esto debe mirar más hacia afuera que hacia su interior. Está siendo deslumbrado por lo externo, perdiendo con ello la posibilidad de realizar el más bello de los viajes, que es el que lo lleva a conocer su interior, donde encontrará la fuerza necesaria para tomar decisiones que fortalezcan la esencia de su ser y abandone el parecer.


Hoy la generación que domina mira más hacia afuera que hacia adentro; son más individualistas y entienden que los bienes materiales y el dinero deben ser adquiridos de manera rápida porque eso es lo que da estatus.


Muchos afirman que es una verdadera pérdida de tiempo escuchar historias en las que sus protagonistas cuentan que trabajaron más de 25 años construyendo su riqueza, pero que a lo largo del camino aprendieron mucho y disfrutaron cada logro obtenido por pequeño que este resultara, porque la felicidad y la riqueza espiritual, más que un destino son un camino.


Cabría preguntarse qué hacer con una casa grande, bellamente decorada en la que se pueda filmar una película romántica y que esa película no sea la tuya y la de tu familia. Esta generación no quiere cambiar tiempo con sus hijos por una disminución de su fuente de ingreso, poniendo en juego los verdaderos principios y valores que sostienen la familia como núcleo básico de la sociedad.






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